Sopló

Primero de diciembre y justo sopló viento fresco por uno dos días.
Fué un alivio. Y es verdad. No vendría mal tener un día fresco en la semana.
Un día que podamos respirar más hondo, de poder usar el buzo nuevo viejo de la feria americana de la iglesia y que los ventiladores puedan descansar un poquito.
Fueron dos días de dormir increiblemente bien y de acordarse de lo que es sufrir un poquito esperar el colectivo de noche y que nunca viene. Taxi ida y vuela, no da.
Me encanta el verano, quiero el verano, pero algo con vientos de otoño me toca y nunca supe explicarlo.
Ayer volvía caminando por Necochea y sentí frío. También sentí el olor a madera quemada y que hay una parte que es muy verde y eso me traslada a un domingo por la tarde en un lugar dónde hay que haber tomado un tren para llegar. A. Pero no se bien donde es. Creo que es un poquito ese paseo que hicimos una vez en bicicleta y esa feria de antiguedades que hay por olivos por ahí. Y un otro poquito el sur.
Y un otro el tigre.
Y es chocolate caliente y el placer de entrar en un lugar donde hace calor.
Pero estas palabrás es un mínimo comparado con lo que siento.
Es hermosamente raro.

Ayer fué lujo en la iglesia por haber llevado mi propia computadora. De esa manera podía escuchar mí música y concentrarme mejor.
Después hubo cafés en vasos altos al estilo "tres capas". Leche, café y leche.
Y pepparkakor, porque oficialmente iniciamos diciembre y esta permitido comer pepparkakor todos los día. Próximamente salé glögg.
Tengo muchas ganas de organizar un evento navideño.
Después de rato lindo y ducha no tan caliente me fuí para Montserrat y la parillita que hacia mucho que no ibamos. Ahí esperaba la lala y había mucho para decir.
Cuando llegó la hora de los bostezos decidimos despedirnos y cada uno para su lado.
Yo para el sur donde esperaba cama y casa desordenada.

Esta mañana seguía así de lindo y armé el arbol navideño en el restaurante donde si salia aromas navideñas porque Nancy había hecho sus propios galletitas de jengibre para el café de mañana.
Un lujo.
Ahora estoy entre si armar o no armar algo yo. Un algo.

Hay tres cafés y voy por más. Será que es jueves.
Será que es diciembre.
Será porque sopló viento.

Espero lindos jueveses