Tuesday, 10 April 2012

Paseo

Rauni me muestra fotos en blanco y negro.
De ella como niña.
De su madre joven y su abuelo con su moto. Orgulloso.
Después salen fotos de Rauni ya adolesente.
Con su primer novio.
Son los setentas y Rauni no era rubia en esa época.
Tenía el color que yo soñe el otro día.
Se fué cambiando. Su look.
Lo único que no cambió parece, fueron sus pocas ganas de posar.
Esconde su cara, o mira al costado.
Lo mismo hace cuando digo esta bonita hoy.

Tomé el tren para su casa en Virreyes.
Fué un lindo paseo.
Y eso de darse cuenta qué después de Beccar cambia todo.
Entrás en un mundo más bonito a mi gusto.
Las casas ya no son tan lujosas, no hay edificios altos y todo se ve más con pies en la tierra y mugre entre los dedos.
Ella me espera en la estación y es imposible no verla con ese pelo rubio flotando en el aire.
Caminamos calles de piedras y el sol de la tarde esta perfecta.
Hace tostadas y panqueques. Mis medialunas sobraron.
Y había un hurón que me asustó un poquito.
Creo que es porque no estoy acostumbrada nomás.

Fué muy cozy todo.
Y al tirarse al sillón y leer revistas suecas, me trasladó a casa de madre mía.
Eso es calor y cariño.

Vuelvo en la oscuridad y con viento de otoño.
El tren me deja en Lisandro de la Torre y camino calles que nunca camino.
Como ex arribeños que ahora es Malaisia. Y así.

1 comment:

  1. cristina leguizamon11 April 2012 at 19:32

    hola K! que cosa es COZI?...lisandro de la torre que lindos recuerdos para mi esa estacion! besos

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