Primero de dosmiltrece

Despertarse y el vecindario en silencio.
Hasta los perros.
Es extrañamente hermoso.

Es la tarde ya.
Hacia rato que no dormía hasta esas horas.
La casa también está sin ruidos.
No escucho la puerta de la heladera abrirse y cerrarse.
Tampoco siento el olor a café.
O gente hablando en otros idiomas.

Bajar por las escaleras y encontrar a Eva en la mesa con la taza de té y la computadora.
Hacia horas que estaba despierta ella.
Se ve que estaba durmiendo profundo yo.

Comer sobras, en bata.
Tomar mate y café, en bata.
Hablar , hablar y hablar.
En bata.
Provar vestidos y tacos.
En bata.

La brasileras abren un vino y conviden.
Yo, sigo en bata.

Seguir así.
Las horas que pasan en y al rededor esa mesa.
Las cosas que pasan en y al rededor esa mesa.

Por la puerta del patio entra un aire que es casi más que fresco.
Que lindo que se siente por dónde la piel se encuentra desnuda.

Cuando ya es de noche, pero todavía hay luz de día, ella se va.
Yo me baño, me visto y miro las nubes que están muy presentes.
Es sentir frío y gustar de eso.
Pienso un poquito de que si el primer día del nuevo año es así de lindo, debe ser un señal de algo.
Bueno.

Abro carpeta "enero 2013" y no me equivoco.

No me equivoco.