Johanna manda fotos que sacaron los otros.
De vos.
Cuando no sabías.
Y cuando había levantado ese viento fresco y que había que ponerse la remera de otro.
Que pensabas en ese momento.
Que en ese viento.
En ese lugar.
Hoy es un mes más tarde.
Más adelante.
Más en el futuro.
Que mañana ya va a haber pasado.
Al pasado.
Hoy fue embalar cuadros de otros tiempos y decidir poner un fin a este tiempo.
Un plazo.
Cuando de golpe darse cuenta de lo único que hay que hacer.
Que se puede hacer.
Que no quedan otro caminos.
Ni los del costado o este, el que corta otros caminos.
No.
Nono, hay que agarrar este camino.
Ahora lo se.
Por eso no hay más vueltas atrás.
Por eso ahora sentí algo liviano.
Al volver.
A encontrarme con.
Tiré el sillón roto con mil historias para contar.
De la mía y la de el.
La alfombra y las mil botellas.
Y que no costó nada.
No dolió en ninguna parte.
Con eso me guío.
Porque se que Dylan va a seguir allí.
Mery me va a invitar a su taller y Anita va a estar en esa casa hermosa y nadando en su, el mar, los martes y jueves.
Madre va a ir a Mallorca este verano también y Isabel siempre va a ser la hermana mayor.
No hay otra.
Y que suerte.
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