Les quería contar de mi experiencia en el Hospital Algerich ayer.
Resulta que a mi hermana le había agarrado como un atacke de alérgia que no sabíamos de dónde venía.
Estaba bastante roja en muchas partes del cuerpo y le picaba.
Fuimos al hospital.
Nos pedían el documento de Vicky, que no existe, pero aceptaron la mía.
Osea, nisiquiera tienes que tener Documento para que te atiendan.
(Todos los demás, si tenían documento porque lo vi!)
Esperamos una hora, que fué volando bastante rápido entre dedos cortados, bebés con fiebre y linyeras llendo a usar el baño del hospital para salir todos peinados y más "limpios".
Un médico mujer muy elegante y linda nos atendio en un cuartito superchiquito, dónde otro médico elegante atendía a otra.
Venían otros médicos corriendo por aqui y por allá, todo muy E.R, cómo la serie.
Era cómo otro mundo adentro de esas puertas.
De golpe a Vicky le dieron una inyección (que Graciela dice sale como 1oo pesos) y en mi mano tenía el medicamento que Vicky tenía que tomar, junto con una lista de cosas que no puede comer.
Y pero que pasó en el medio? No salteamos un paso?
No me tenían que dar primero la receta para ir a buscar la inyección y el medicamento y después volver para que la dieran?
Parece que no.
Conclución; vivimos en un país de maravilla dónde te atienden bastante rápido, no tienes que tener documento (osea un indocumentado cómo Vicky que aparte viene de Suecia, el verdadero país de maravilla) , no tienes que tener ningún seguro ni nada de eso Y te dan el medicamento gratis.
Aparte que los médicos son remacanudos, o por lo menos los del Algerich!
Mientras Vicky estaba bastante dolorida de la inyección yo estaba orgullosa.
tu orgullo me contagia orgullo a mí también, así son las cosas
ReplyDeletequé lindo lo de los primeros y segundos mundos... quizá el hecho de que exista uno que esté en el lugar número uno y otros por debajo tb signifique que se puede llegar, no?
ReplyDeletehoy leí 2 cosas muy distintas... este texto con mucho énfasis en contar esta experiencia y otro... que me quedó en la retina... NO PUEDO DEJAR DE LEERLO...