Ardo, ardes, ardemos.
Y todos juntos.
Las calles andan en silencio porque esta hot y no hay mucho más para agregar.
En estos días nos mostramos nuestros verdaderas yo.
Como en yo en calor, en gotas, en sin remera, en hollas al fuego y así.
Cuando entra un soplo de viento hay un suspiro y un aaah.
La casa de Natalia, la vecina es muy linda.
Cuando entro allí siento que estoy en mi espacio.
Es calmo, tiene todo cositas y arma muebles lindos de antiguedades.
Sus muebles iria en la casa de te, y la debería avisar.
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