Thursday, 30 July 2015

Un año atrás



Thursday, 31 July 2014

Dieta Suave

Salvo por el 168 que pasa a ciento diez, el barrio se encuentra extraordinariamente silencioso.
Las personas, sus obras y los negocios.
Es noche nublado, sin vientos y casi ni un gramo de frío.
Hablan de la humedad y de sacarse la ropa.
Pero la ropa igual se seca.
No se donde están los otros dueños de perro paseando sus perros.

Es Kubrick y yo.
El silencio y nuestros pensamientos.

Hoy andan en el equilibrio que yo tanto ando pensando en.
Hablando de.
Hasta a veces diciéndolo con el dedo.
Después soy yo la que caigo en justamente eso.
El dedo me toca a mi.
Me hace no dormir y caminar agachada.

Reconocí ese dolor.
Pensé que sabía de lo que se trataba.
Que esta vez iba a estar preparada y fuerte.
Y que me iba a recordar como eran los pasillos del Algerich del otro lado.
Donde dice prohibido pasar.
Tal vez porque seguramente vas a ver cosas que no vas a querer ver.
Y que al final, todos pueden pasar a ese lugar.
Nadie te va a prohibir.
Cuando te das cuenta de que todos que caminan por ahí están igual de perdidos que uno.
Que es yo.

Consultorio 100 con un médico que parecía un escritor.
Que hablaba igual que raro como yo.
Confundía Sueca con Croata.
"De Croacia me decías?" No, de Suecia.
Ah.
Y tres veces me preguntó si tenía alergia a algún medicamento.
Después a sacar sangre junto con el linyera que no lograban sacar nada de.
El insistía que tomaba mucho jugo de naranja.
Llevaba toda su vida en esa silla de ruedas.
Y parecía estar contento, al pesar que estaba en el hospital.
Hacer pis en una botella cortada y último la inyección de esa cosa mágica que no se que es pero que ayuda a sacarte encima esos dolores.
Magia.

Acostarte en uno de los cienes de sofás que hay en la iglesia y no querer moverte ni una gota más.
Porque encontraste la posición justa donde no te duela.

Y están todas esas personas que te dan tranquilidad.
Escuchar Rosa debatiendo bajito con Analía.
Eva dando clases a Alberto y así.
Todo como una guante suave de lana.
Algodón.
Mimo.

Después de todo resulta que no tienes nada.
Tu pis y sangre está perfecto.
Te dicen dieta suave y buscapina compromido.
Y tranquilidad.

Yo pienso que tengo falta de equilibrio.
Que esa es mi verdaderamente enfermedad.
Que sale así.
En revolución en la pansa.
De en vez en cuando.

Vicky me pasa a buscar.
Compramos los comprimidos y nos acostamos un rato juntas en la cama con la frasada que compré en la cruz roja en Francia.
Y creo que nos ayuda un poco.
Mis dolores se van de poquito mientras Vicky alarga sus cosas de a poquito.
Un intercambio de dolores capaz.

Thursday, 23 July 2015

Casí Ellen

Las noches más hermosas son las frías.
Por ahí el día no estuvo tán de acuerdo.
Pero en el final esta la recompensa.

Por la tarde vez a uno de tus hermanos a travez de una vidriera.
El a su vez esta atrás de un otro vidrio charlando con el chico que esta sentado en el asiento de pasajeros.
Trato de hacerlo verme, pero el esta muy concentrado en su charla.
Como si cada letra que sale de su boca valiera oro.
Y su pasajero, serio.
Hago señales de fuego con mis brazos, pero no, no hay forma.
No me ve y no me va a ver.
Porque estoy adentro de una fotocopiadora y hay dos vidrios que nos separa.
Hoy no estamos en el mismo mapa.

Las noches más calientes son las frías.
Porque llevo esos ojos marrones como una foto en mi y me acompañan en mi regreso a casa.
Me abrigan y me dan calor.

Después estan todas esas otras vidas que me llenan cuando estoy cansada de ser el relleno.
Estan allí como un abrazo fuerte, como el agua caliente y el caramelo dulce.

Trato de recibir nomas.
Sin culpas.

Y de golpe hay un día que vuelvo a casa antes que baje el sol.
Porque julio resultó ser un poco así.

Inesperado.
Necesario.
Sorprendente.

Y es esa tarde que encuentro el nuevo lugar.
El lugar donde puede ser que salga cosas hermosas.
Por como cae la luz.
Por las cosas que vez por esa ventana.

Y porque justo allí hay un enchufe para el caloventor.

Por todas esas cosas, gracias

Jueves volare


Tuesday, 21 July 2015